¿Indignante? Nooo... ¡Repugnante!

Al hilo de los nuevos casos de corrupción aparecidos a duras penas y a pesar de los palos que el Partido Popular pone en los radios de la rueda de la justicia, solo me cabe expresar mi repugnancia luego de haber pasado indignado mucho tiempo en esta tesitura a lo largo de los últimos 20 años, desde la toma del poder del partido que gobierna aún hoy en día. 

Desde que Aznar salió elegido como presidente del gobierno en 1996 no se ha parado de robar los caudales públicos y reducir las prestaciones y las inversiones que no tenían una salida  beneficiosa para los políticos de turno. Debo recordar que el partido popular salió elegido  debido a las constantes denuncias  de los populares hacia las corruptelas del PSOE, que si lo miramos desde la distancia, nos parecen ahora calderilla en comparación con los atracos al estado que perpetran estos auténticos gansters del siglo XXI.

Repugnancia me produce la corrupción y el enriquecimiento personal, como me repugna igualmente la financiación ilegal del partido popular con las coimas de las obras públicas en los diferentes estamentos del estado ya sean ayuntamientos, comunidades o el mismo gobierno nacional. De los otros partidos hablaremos en otra ocasión.

Repugnancia me produce junto a un estado de irritación permanente al escuchar a los políticos populares que o bien no sabían nada o bien son los encausados los que van de enemigos del partido o que son manzanas podridas o que son individuos que han salido "ranas". Pero ¿es que creen que la gente es gilipoyas? Me ofende que me traten como imbécil, cuando si consiento que esto ocurra es porque para impedirlo tendría que o soportar la acción agresiva de la policía y una posible sanción importante o pasar a la acción armada y eso... ¡eso sería considerado  terrorismo!. Todo esto debido a la ley de "seguridad ciudadana" comúnmente denominada ley "mordaza" por la autoprotección que se otorgan  las instituciones públicas  en general y el gobierno del PP en particular, no olvidar que esta ley fue aprobada en tiempos de mayoría absoluta del PP con la finalidad de parar la protesta en la calle.   

Todo esto es, como poco, inquietante, pero hay otro aspecto que me tiene muy preocupado y no es otra cosa que el apoyo que mis conciudadanos dan en la urnas al partido popular que, con un casi 30%  es "mucha tela". Las preguntas que no dejo de formularme son : ¿se da cuenta la gente de lo que se está permitiendo? ¿no les importa que les vacíen los bolsillos? Se me ocurren tres respuestas : o son masoquistas o están abducidos o, lo más probable conociendo a "mi gente", Tienen aspiraciones de llegar a ser como ellos.

La verdad es que los servicios públicos están abandonados, la atención a las personas con dependencia casi desarmada,  la educación y la salud en precario y de la ley para la lucha contra el franquismo mejor no tratarlo. Y todo ello bien protegido por los ministros tanto de justicia como de Interior y de los fiscales de cierto rango, procurando promover a los jueces que pueden tener intervención en favor de una instrucción favorable y un juicio, si se llega a ello, irrisorio.

Y la última reforma laboral que mientras los políticos "peperos" hacen de lo público su coto privado  expulsan a los trabajadores a la miseria y a los licenciados e investigadores a buscarse la vida en el extranjero en el mejor de los casos sirviendo mesas en bares o limpiando váteres.

Compañeros si esto te repugna, te indigna o te irrita piensa un poco en lo que deseas para España y planteate una acción de futuro.