"Homo homini lupus"

En el mundo de nuestros ancestros, en los que la supervivencia dependía de una casualidad, se puede comprender que los hombres se mataran unos a otros para sobrevivir aunque fuera poco inteligente, dado que cuantos más elementos de la estirpe humana hubiera mejor se aseguraba la lucha contra las otra especies y asegurar de mejor modo la supervivencia colectiva. Podemos comprender que la raza humana de entonces no hubiera desarrollado aún la conciencia de sociedad tal y como la conocemos en estos días, aunque convivieran de modo  colectivo y con alguna noción de clan o tribu.

A lo largo de la historia de la humanidad en la que ya dominan los humanos plenamente vencedores en la selección biológica natural a la que la madre naturaleza sometió y somete a las especies, se dan episodios violentos más o menos épicos, más o menos sádicos o más o menos defensivos u ofensivos, pero siempre como consecuencia de algún ataque de otros humanos o como consecuencia de la leyes en vigor de cada época.

En nuestros días y tras las dos grandes guerras, siempre ha habido un lugar en el mundo con algún conflicto bélico o represivo en algún país exceptuando, claro está, el territorio de los Estados Unidos de Norteamérica donde las guerras han sido solo civiles o contra los indígenas y de eso hace mucho tiempo.

Pero no es exactamente de la maldad bélica de la que quiero hablar sino de esa maldad individual que pasean con orgullo los malvados cometiendo sus tropelías contra indigentes, homosexuales, mujeres, inmigrantes, refugiados y cualquiera que se ponga en su camino de maldad estúpida, porque ni llega a la categoría de depredadora.

Dejando a un lado la maldad machista cuya repercusión social llena páginas en los medios de comunicación y pocas me parecen, quisiera hablas de esa maldad inútil que no reporta ningún beneficio al malvado, esa maldad por puro divertimento, gratuita y que suele salir gratis a o al menos muy barata al hijoputa violento.

Algunos ejemplos : unos niñatos queman vivo a un indigente, un gilipoyas da unos bombones rellenos de pasta de dientes a un mendigo, un estúpido desequilibrado da una patada en las piernas a una chica estando en una parada del bus, un grupo de fachas a la caza del inmigrante que duerme en la calle y le propinan una paliza con resultado mortal o casi, un "curruco" del este europeo portero de discoteca le da un puñetazo a un chaval y lo tumba en coma con graves secuelas ... en fin tantos y tantos episodios de maldad que miedo me da pasar al capítulo  siguiente, el "mobbing escolar".

En estos casos, la maldad es absolutamente indecente, porque lo que se busca es asentar en los demás unas bases de conducta sumisas a la voluntad de un grupo, vamos ...¡PURO FASCISMO!. Y lo mas absurdo es que con los medios de hoy día, los violentos ¡graban con sus teléfonos  móviles la hazaña y la suben a las redes sociales! Vamos que no se cortan ni un pelo.

Y ¡que vamos a decir de los gobernantes!, sus acciones u omisiones en aspectos tales como la solidaridad universal, el sostenimiento del planeta, la producción y tráfico de armas, su  sometimiento a la voluntad de los poderosos, las grandes multinacionales en detrimento de la salud y el bienestar de los gobernados, causan en nosotros mucha desgracia e incluso mortandad por hambruna o por guerra insensata.. 

No podemos en este estado de cosas seguir siendo buenos cristianos y seguir poniendo la otra mejilla, eso se debe acabar, hay que oponerse, hay que luchar, estamos dejando de lado la lucha contra los poderosos  y eso nos llevará a hacer cierta la frase pero con algún matiz : " los humanos somos corderos para los lobos poderosos y los  malvados".